A la captación del nuevo consumidor de vino

Cuanto antes asimilen las bodegas que en España no se volverán a alcanzar niveles de consumo de vino como los de antaño, antes se le podrá poner remedio al sobrante de la producción de vino que tenemos.

Una solución pasa por proyectarse al mercado internacional, cosa que si han realizado las bodegas españolas en el último lustro. Lo preocupante es que en muchos casos ha sido una expansión en volumen y no en valor (ejemplo de China donde Francia es el primer exportador con casi 6 euros el litro de vino, Australia el segundo con más de 7 euros el litro y España es el tercero con poco más de 2 euros el litro).

Que el stockaje de vino se reduce es un hecho, pero a costa de reducir el precio de lo exportado y, por lo tanto, redundando en la bajada de los precios de la marca ‘vino de España’ en su conjunto.

Otra solución pasa por incrementar la cuota del mercado nacional y, como no puede ser de otra forma, debe ir encaminada hacia el público más joven, al denominado ‘consumidor del milenio’, aquellos nacidos entre la década de los 80 y 2004.

Son los consumidores potenciales de vino dentro de 10 años.

Perfiles de estos nuevos consumidores:

• Poseen una conciencia más social motivada porque han conocido la crisis económica en su plenitud.
• Mayor preocupación por su entorno, tanto desde el punto de vista del medioambiente como de las desigualdades sociales.
• Nacidos en la era digital, son nativos de medios digitales, no es que se hayan adaptado a las nuevas tendencias.
• Más abiertos a probar nuevas cosas y romper estereotipos.
• Buscan que las marcas no les bombardeen de publicidad, prefieren sentirse unidos de forma diferente a las marcas.
• Una generación en la que el autoempleo está la orden del día lo que los convierte en espíritus más emprendedores.

En fin, todos estos factores se resumen en que tenemos que captar a un cliente más social. Se interesará más por la labor de RSC de las bodegas, querrá estar informado cada día más de lo que estas hacen y de sus vinos. Se preocuparán de como son elaborados. No tienen miedo a combinar un vino tradicional con otro tipo de licor.

¿Qué está haciendo cada bodega que lea este artículo a este respecto para conseguir atraer la atención de los nuevos bebedores de vino?